Introducción
Hoy me desperté con dos grandes noticias, la primera es que muy probablemente muramos por las olas de calor que han azotado últimamente, pero la segunda, y la que más me gustó fue la del nuevo lanzamiento de OpenAI.
Hoy me desperté con dos grandes noticias, la primera es que muy probablemente muramos por las olas de calor que han azotado últimamente, pero la segunda, y la que más me gustó fue la del nuevo lanzamiento de OpenAI.
Hola Cibernícolas, ¿recuerdan mi post de hace unas semanas sobre La lista de espera para acceder a ChatGPT+? Bueno, pues tengo noticias flipantes tío (oleee xd), ayer, mientras me encontraba en el trabajo veo que me llega un mail a mi correo personal, y era nada más y nada menos que la invitación para acceder a ChatGPT+. No les miento si les digo que esa fue la mejor noticia del día, y es que había esperado mucho tiempo. Esta versión fue lanzada en febrero de este año, pero justo este mes me decidí a entrar a la lista de espera, y pues aquí estamos.
Hace tiempo que vivimos la revolución de la inteligencia artificial y algunas personas podrían llegar a pensar que el campo del texto generativo está por llegar a su fin, pero no podrían estar más equivocados.
Como saben, soy un gran fanático de la Inteligencia Artificial, y como estamos a finales de año eso significa que tendré vacaciones en la Universidad, si bien, seguiré en mi trabajo habitual esto se traduce en un poco más de tiempo libre para cacharrear por ahí.
A día de hoy, nos enfocamos principalmente en el estilo de la web, en la forma en que se ve. Sin embargo, no siempre fue así. En los inicios de la web, el contenido era lo más importante. La web era un lugar para compartir información, no para mostrarla. Con el tiempo, la web fue evolucionando y se fue convirtiendo en lo que es hoy en día. Sin embargo, todavía hay muchas personas que prefieren el contenido sobre el estilo. Para ellos, existe Markdown.